A fines de 2021, los conductores que transitaban por la autopista 5 en el norte del condado de San Diego observaron en el asfalto unas llamativas franjas naranjas y blancas. Estas marcas no son una adición estética, sino una innovación de las nuevas leyes de California destinadas a mejorar la seguridad vial en las zonas de construcción y a garantizar que los vehículos reduzcan la velocidad.

En específico, el estado de la costa este de EE.UU. lleva a cabo un proyecto de US$987 millones, que implica la adición de carriles para vehículos compartidos en ambas direcciones de la autopista, entre la 78 en Oceanside y Lomas Santa Fe Drive en Solana Beach, y que busca abordar los persistentes atascos de tráfico en esa área.

Caltrans, la agencia estatal de transporte, le dijo a KTLA 5 News que los colores contrastantes de las franjas están diseñados específicamente para aumentar la conciencia de los conductores en esas zonas de construcción y mejorar la seguridad tanto para ellos como para el personal de la carretera.

Los resultados positivos de las franjas naranjas y blancas en autopistas de California

La elección de los colores también busca mejorar la visibilidad de las líneas, especialmente durante condiciones climáticas adversas con lluvia y niebla. De acuerdo con Steve Welborn, Gerente de Asuntos Públicos de Caltrans, los datos de una encuesta reciente revelan que aproximadamente el 83,18% de los usuarios que viajaban por los carriles marcados con franjas naranjas experimentó una mayor conciencia de estar en una zona de construcción.

Además, el 72% redujo la velocidad después de ver las franjas de contraste y casi el 75% encontró que las líneas eran más fáciles de ver por la noche. Incluso si los conductores no estaban seguros de qué significaban exactamente las líneas, la presencia del color naranja hizo que pensaran en una zona construcción.

Esta iniciativa no solo responde a la necesidad de mejorar la seguridad vial en zonas de construcción, sino que también destaca la importancia de la innovación en infraestructura para abordar los desafíos del tráfico en áreas urbanas densamente pobladas como el condado de San Diego. Con estas medidas, se espera que los conductores puedan transitar de manera más segura y eficiente por las carreteras de California.

¿De qué trata el ambicioso proyecto de transporte en California?

La prueba piloto de las franjas naranjas y blancas en los carriles es solo una parte de un proyecto de transporte más amplio en el norte del condado de San Diego, que forma parte del Programa del North County Corridor (NCC) liderado por Caltrans y SANDAG (San Diego Association of Governments). En específico, abarca las ciudades de Solana Beach, Encinitas y Carlsbad.

El objetivo principal es mejorar la calidad de vida de los residentes, fortalecer la economía local y regional, y proteger el medio ambiente costero. Para lograr estos objetivos, se llevan a cabo una serie de proyectos de transporte, medioambientales y de acceso costero.

En el marco de este programa, Caltrans y SANDAG han decidido construir dos carriles para vehículos de ocupación (HOV, por su sigla en inglés) en la Interestatal 5 (I-5), uno en cada dirección. Estas mejoras en las carreteras también incluyen la construcción y extensión del puente de la Laguna San Elijo, la construcción de muros acústicos en propiedades privadas, la adición de carriles auxiliares y la mejora de la línea ferroviaria.

Además, se construye una nueva instalación de usos múltiples en el intercambio I-5/Manchester Avenue, que proporcionará estacionamiento para vehículos compartidos, estacionamiento para bicicletas, infraestructura para vehículos eléctricos y acceso recreativo a la Laguna San Elijo, así como un nuevo sendero para bicicletas de la Costa Norte.

El programa piloto continuará hasta que se complete el proyecto de construcción, que se espera que ocurra en 2025. Después de eso, Caltrans planea evaluar la efectividad de las franjas y considerar su implementación como una práctica estándar en todo el estado.