NUEVE DE JULIO, Corrientes (De un enviado especial).– La investigación por la desaparición de Loan Peña tiene tres detenidos por el delito de abandono de persona. Uno de ellos es Bernardino Benítez, tío del menor de 5 años que es buscado desde el pasado jueves. Ese hombre y los otros dos arrestados, Daniel Ramírez y Mónica del Carmen Millapi, por ahora se mantienen en silencio tras negarse a declarar por consejo de su abogado, Jorge Monti. El letrado estuvo ayer en la zona donde se efectuó una reconstrucción del momento en que se perdió el rastro de Loan, de la que participaron los menores que habían ido con él a buscar naranjas.

En diálogo con la prensa, el abogado Monti declaró: “Es un caso muy raro, rarísimo, donde no conseguimos pruebas suficientes y donde aparecen otros elementos extraños que los estoy incorporando de a poco. Hoy (por ayer) incorporé uno temprano”, dijo sin revelar demasiado sobre el aporte a la pesquisa. Pero enseguida sentenció: “Yo no creo que se haya perdido”.

“Los detenidos van a declarar cuando yo diga, salvo que me revoquen el poder. Yo tomé conocimiento de la causa esta mañana (por ayer) y conozco por primera vez el legajo de la investigación, de ahí yo voy sacando conclusiones, que es lo que tengo que hacer”, señaló el abogado cuando fue consultado por el silencio de los detenidos.

En este sentido aseguró: “Yo estoy ofreciendo pruebas apuntando a demostrar que mis clientes son inocentes, entonces esas pruebas son las que ustedes vieron y otras que van a ver mañana y van a generar mucho ruido porque no solo son documentos, sino que son fotos y audios”.

El abogado de los tres detenidos señaló, por otra parte, que quiere que se llame a dar testimonio a los otros mayores que estuvieron en el almuerzo familiar, pocos minutos antes de la desaparición de Loan.

En tanto, se conoció ayer que a la investigación de la causa por la desaparición de Loan se incorpora el fiscal Guillermo Barry, quien trabajará en conjunto con Juan Carlos Castillo, titular de la UFIC de Goya, que está a cargo del caso.

Anteayer, durante el quinto día de búsqueda, Castillo había comentado que “no se descarta ninguna hipótesis en relación con cualquier otra cosa que pueda surgir”.

De esta forma, si bien el operativo de rescate está basado en las evidencias de que el menor se habría perdido en el monte tras alejarse del grupo con el que se encontraba, el funcionario adelantó: “Estamos abiertos a una investigación más amplia, porque es un caso muy complejo”.

Trascendió que anoche se habría hallado una zapatilla en la zona de rastrillaje y que ese elemento será analizado para determinar si se trata o no del calzado de Loan.

Las pistas empezaron a aparecer, literalmente, por todos lados. Eso pasa siempre en esta clase de casos. Por ejemplo, una llamada anónima al 911 alertó a la policía de Chaco sobre un niño que habría sido observado en las inmediaciones del casino de Resistencia. Tuvieron que analizarse cámaras de seguridad para descartar ese aviso. Otros se repitieron en diferentes provincias. Los investigadores tienen un eje central de búsqueda, pero también deben atender esas posibilidades. Y a medida que pasan los días, todo se complica.

Una ONG –la Fundación Alameda–que tiene su base en la ciudad de Buenos Aires y que focaliza su actividad jurídica en la asistencia y asesoramiento a personas afectadas por el trabajo esclavo, las redes de trata y talleres clandestinos, presentó un escrito ante la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex) para pedir que la causa de la desaparición de Loan pase a la Justicia Federal para ser investigada como un eventual rapto con fines de trata de personas.

Mientras tanto, el rastrillaje en el paraje El Algarrobal se intensificó con el aporte de unidades caninas del Servicio Penitenciario bonaerense, policías de Misiones y de Mendoza y militares del Grupo de Artillería de Monte 12.ß